El sueño de cualquier viajero es poder desaparecer durante semanas, o incluso meses, para perderse en cualquier remota parte del mundo. Desgraciadamente no siempre querer es poder, y somos muchos los que por motivos profesionales y/o personales nos tenemos que contentar con escapadas más limitadas de tiempo. Sin embargo, esto no es razón para dejar nuestras ilusiones a un lado. Con buena organización, 3, 5, 7 o 10 días pueden llegar a cundir mucho y no tenemos por que renunciar a destinos lejanos solo por esta falta de tiempo. Es cierto que siempre soñaremos con esos meses sabáticos en los que podríamos disfrutar del “slowtravel” descubriendo nuevos destinos a nuestro aire y sin prisas, pero hasta que llegue ese momento apropiado para disfrutar de un break (soñar es gratis ;)), podemos exprimir al máximo los días de los que dispongamos.

Con este objetivo de estrujar nuestras horas libres he creado el mundo a pellizcos, un blog de viajes que te dará ideas para conocer nuestro planeta en pellizquitos de tiempo.

Como se muestra en su página principal, El mundo a pellizcos consta de las siguientes secciones:

Viajes a pellizcos

El mundo a zancadas

El mundo a mordiscos

El mundo a pasitos

Más pellizcos

Su sección principal, viajes a pellizcos, está dedicada a los viajes en sí. En ella encontrareis varios posts por viaje; generalmente suelo escribir un post resumen de lo que se puede llegar a hacer en una escapada a un determinado lugar, los diarios de viaje: donde describo día a día lo que he visitado, y preparativos del viaje: donde encontrareis toda la información necesaria para la organización y cualquier dato que pueda resultaros útil en el lugar de destino. Debido a mi interés por la historia, como ya os habréis dado cuenta si habéis leído alguno de mis posts, suelo incluir de forma breve pequeñas crónicas, leyendas y anécdotas de los lugares que visito, opino que una pincelada de cultura nunca nos viene mal para conocer mejor los lugares que visitamos..

La segunda sección de mi blog, El mundo a zancadas, está destinada a relatar excursiones por el mundo, ya sea andando, en bici, en kayak…. Y no siempre localizadas en lugares lejanos. Una pequeña excursión a pocos kilómetros de casa también nos permite desconectar de la rutina. Y esa es en esencia la filosofía del mundo a pellizcos, aprovechar cualquier ratito libre para conocer lugares diferentes y disfrutar de la naturaleza.

En un blog como éste, dedicado al aprovechamiento del tiempo libre, no podría faltar un aparatado destinado a la gastronomía. El mundo a mordiscos recoge todo aquello relacionado con ella, desde rutas gastronómicas hasta pequeños descubrimientos de restaurantes, bares, chiringuitos, sitios especiales donde tomarse un aperitivo, comer, merendar, cenar o tomar un café o una copa y pasar un buen rato. Al igual que en el Mundo a Zancadas, estos lugares no se limitarán a los destinos de viajes lejanos, en esta sección también tendrá cabida cualquier sitio que me haya llamado la atención aunque sea a dos pasos de casa.

El mundo a pasitos, como el nombre sugiere, está destinada a las excursiones con niños. La dedico a mis dos encantadores sobrinitos que son mi debilidad. Desde que nacieron organizamos de vez en cuando pequeñas excursiones o escapadas familiares adaptadas a ellos. Obviamente es otro estilo totalmente diferente a las excursiones relatadas en el mundo a zancadas ya que el ritmo será inferior, pero resultan divertidas y pasar tiempo en familia en plena naturaleza no tiene precio.

Por último, he querido añadir la sección de más pellizcos para tener un apartado donde poder compartir cualquier información sobre viajes que pueda resultar útil a todo viajero, como por ejemplo aplicaciones útiles, datos relevantes sobre compañías aéreas, noticias viajeras, etc…

 

Y ¿quién está detrás del mundo a pellizcos?

Soy Aranza, una valenciana dedicada profesionalmente al mundo de la salud y con una incontrolable inquietud viajera. He tenido la inmensa suerte de contar con una familia muy unida y de espíritu viajero que desde bien pequeña me ha dado la oportunidad de conocer sitios diferentes. Probablemente de mi padre haya heredado las ganas irrefrenables de salir a descubrir mundo detectando y reteniendo, casi inconscientemente, lugares especiales en cualquier publicación o reportaje, y de mi madre su interés por la historia y esa capacidad organizativa imprescindible para mis viajes a pellizcos, en los cuales pretendo abarcar tantas cosas en tan poco tiempo siempre sin olvidar dejar espacio para los momentos de relajación tan necesarios para disfrutar de la experiencia viajera y volver con sensación de paz y desconexión.

Este blog no seria posible sin la imprescindible colaboración de mi primo Miguel. “Pon un teleco en tu vida”, es mi lema desde que nos reencontramos y surgió la idea del mundo a pellizcos. Él es el encargado de toda la parte técnica del blog, además de ayudarme contribuyendo con ideas creativas. También he contado con la colaboración y el apoyo incondicional de mi amiga Bea, que ha sabido plasmar la idea del mundo a pellizcos en el diseño del logo y me ha asesorado en el aspecto estético de la web. Con la ayuda e implicación de la gente adecuada el desarrollo de un proyecto como éste hace aún más ilusión.

Como podréis apreciar el blog es muy reciente y todavía queda algún detallito que se puede mejorar pero poco a poco iremos subiendo contenido y puliendo estas pequeñas cosas. Por supuesto, estoy abierta a cualquier crítica constructiva que me podáis hacer, soy nueva en esto y cualquier aportación será bienvenida. Por el momento espero que el mundo a pellizcos os ayude a sacar el máximo partido a vuestros días libres y, hasta que nos toque el Euromillón y podamos desaparecer del mapa sin importarnos la fecha de vuelta, podáis ir pellizcando el mundo a ratitos.